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    Martes, 23 Abril 2024 18:39

    En Contexto 2/24

     

     
         
    Afectaciones por cosecha de aguacate en México
     
    Número 2/246

    En el occidente de México, los bosques están siendo arrasados a un ritmo vertiginoso, impulsados por el gran interés de Estados Unidos por los aguacates.

    Del total de campos de aguacate en Michoacán, se estima que alrededor del 30% son ilegales, además de que existen otras áreas en el estado que ya no son viables. El aguacate está acelerando el proceso de desertificación y haciendo que la situación sea más dramático.

     

     

     

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    Antecedentes

    Distintos intereses intervienen en la tala de bosques para dar espacio a los plantíos de aguacate, entre ellos los de grupos delictivos, terratenientes, autoridades locales y líderes comunitarios, donde en muchas ocasiones los terrenos privados son incautados de manera ilegal.

    A partir del interés de Estados Unidos por importar aguacates de México hace menos de 40 años, el consumo se ha elevado, impulsado por campañas de mercadotecnia que promocionan el fruto como un alimento saludable para el corazón y la demanda durante todo el año de platos como tostadas de aguacate y rollos California. Los estadounidenses comen tres veces más aguacates que hace dos décadas.

    Al sur de la frontera, satisfacer esa demanda ha implicado la pérdida de bosques, el agotamiento de los acuíferos para proporcionar agua a los árboles de aguacate, que necesitan mucha agua, y un aumento de la violencia impulsada por bandas criminales que pretenden incursionar a la fuerza en un negocio rentable. Los funcionarios ambientales mexicanos han pedido a Estados Unidos que impida que los aguacates cultivados en tierras deforestadas ingresen al mercado estadounidense, pero los funcionarios locales no han tomado ninguna medida. Se han identificado cómo los cultivos en tierras deforestadas suministran aguacates a los distribuidores de alimentos estadounidenses, que a su vez los venden a las principales cadenas de supermercados del país.

    En el oeste de México la población local que lucha contra la deforestación y el robo de agua se ha convertido en blanco de intimidación, secuestros y tiroteos. Al igual que la deforestación en otros lugares, arrasar los bosques de pino-roble y oyamel de México reduce el almacenamiento de carbono y libera gases que provocan el calentamiento climático. La tala rasa para los aguacates, que requieren grandes cantidades de agua, ha provocado otra crisis al drenar acuíferos que son vitales para muchos agricultores.

    En Michoacán, la industria del aguacate da empleo a más de 300.000 trabajadores en un estado de 4,8 millones de habitantes, según cifras del gobierno. Más de 10.000 hectáreas de huertos de aguacate autorizados para su exportación a Estados Unidos se encuentran en tierras que estaban cubiertas de bosques en 2014, según geógrafos ambientales de la Universidad de Texas en Austin.

    A finales de la década de 1990 Michoacán consiguió cumplir con las exigencias de Estados Unidos para exportar aguacates, y desde entonces el volumen ha ido creciendo. Como consecuencia, los paisajes michoacanos han cambiado radicalmente en los últimos años: donde había frondosos bosques de pinos, ahora hay hectáreas infinitas de plantaciones de aguacate; donde había lagos, ahora quedan apenas charcos e incluso algunos se han secado totalmente.

     

    *Con información de diferentes medios.

     

     
    Publicado en Publicaciones
    Miércoles, 31 Enero 2024 15:17

    En Contexto 1/24

     

     
         
    Afectaciones por la sequía
     
    Número 1/246

    México enfrenta su peor crisis de desabasto de agua en su historia. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha declarado que más del 65% (mil 613) de los 2 mil 471 municipios del país atraviesan un escenario de sequía, y las reservas en la principales urbes comienzan a escasear. Aunque el tema es de suma urgencia, las autoridades no han anunciado giros importantes en las políticas para garantizar el abasto de agua a más de 126 millones de personas para los próximos años.

     

     

     

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    Antecedentes

    La falta de lluvia y los bajos niveles en las presas están provocando conflictos por el desabasto que hoy son una realidad que aqueja diariamente a los mexicanos. Los bloqueos de avenidas y carreteras por la falta del líquido son cada vez más recurrentes y la crisis hídrica comienza afectar a poblaciones que antes no se inmutaban por estas problemáticas.

    Durante el inicio de 2024, el porcentaje de áreas con sequía de moderada a excepcional a nivel nacional fue de 61.59%, lo que significa 6.75% mayor que lo cuantificado a finales de 2023. Según datos de la Conagua, actualmente 28 de las 32 entidades federativas presentan algún nivel de sequía en más del 50% de su territorio. Sonora, Chihuahua, Durango y Querétaro son los estados más afectados, mientras que en entidades como Nuevo León, Jalisco y Ciudad de México el panorama oscila entre anormalmente seco y sequía severa. Sólo Baja California, Baja California Sur, Colima y Quintana Roo tienen la mayor parte de su territorio sin problemas de sequía.

    La atención está concentrada en la Ciudad de México, donde sus más de 8.855 millones de habitantes enfrentan el recrudecimiento de la escasez y los recortes de agua, y temen la llegada del día cero, que llegó a la ciudad de Monterrey, Nuevo León en 2022.

    El Gobierno de la Ciudad de México anunció recortes en el suministro de agua, buscando que el agua en las presas del Sistema Cutzamala no se agote antes de la próxima temporada de lluvias, pues se espera que llegue a sus niveles más bajos en junio de este año. Esta medida se reforzó a inicios de 2024 cuando se anunció un nuevo recorte de 800 litros por segundo, afectando a 12 demarcaciones de la capital. Los especialistas señalan que el impacto de esta iniciativa será inexistente, pues se pretende solucionar con lluvias un problema de falta de éstas, fugas provocadas por hundimientos a causa de la sobreexplotación del acuífero de la Ciudad de México. Los recortes y la falta de agua trajeron consigo un incremento en las protestas, e incluso existen acusaciones sobre politización en el suministro que favorece a las demarcaciones afines al gobierno en turno.  

     

     *Con información de diferentes medios.

     

     
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