El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estima que en el año 2023, en México se producirán 64 millones 800 mil toneladas de residuos, cifra mayor a la registrada en 2018, que fue de 55 millones 200 mil toneladas. "Es de esperar que a lo largo del tiempo se produzca un aumento en la generación de residuos sólidos municipales como consecuencia del crecimiento y la distribución de la población, la producción per cápita de residuos en áreas urbanas y rurales y el desarrollo económico de cada uno de los países", explicó el BID en su informe "Sostenibilidad financiera de la gestión de residuos sólidos en América Latina y el Caribe".
Cada vez generamos más residuos plásticos porque consumimos más: estamos cerca de los 400 millones de toneladas anuales a nivel global y cerca del 50% se utiliza en la fabricación de productos de un solo uso, es decir que tiramos casi inmediatamente. Dentro de los residuos que genera México, el 13% son plásticos, de acuerdo con las cifras oficiales. Sin embargo, cuando analizamos la contaminación de residuos marinos, el 80% aproximadamente son plásticos.
Uno de los problemas más graves es la falta de recolección de residuos. En el país, el 17% de los residuos que se generan (120.000 toneladas al día) no se recolectan. Hay más de 200 municipios que no cuentan con este servicio de recolección. Cada mexicano produce un kilo de residuos al día y 170 gramos no se recolecta. Y de eso, al menos 13% son plásticos.
Otro gran problema es la gestión inadecuada de residuos. Los sitios en donde se deposita la basura, en muchos casos, carecen de cualquier medida de mitigación de impacto ambiental o de control. Solo el 2% de los más de 2.200 sitios de disposición de residuos en México pueden clasificarse de control completo, eso significa que se filtren los residuos, se compactan, que después se cubren, que los escurrimientos de agua se capturan y van a una planta de tratamiento, que el biogás se atrapa y se utiliza de alguna forma para producir energía. Ese es un sitio con control completo. Sin embargo, 50% de los residuos se depositan en sitios no controlados, que son la mayoría. Además, 11% de los sitios de disposición del país se encuentran cerca de la costa (a menos de 5 km), y el 92% de los mismos son “no controlados”.
Estados y municipios han generado regulaciones sobre plásticos que buscan prohibir generalmente algunos plásticos y sustituirlos por biodegradables, pero estas regulaciones las ha realizado cada entidad y no son compatibles entre ellas, incluso algunas tienen errores de concepto importantes y eso dificulta su aplicación. Actualmente la Cámara de Diputados trabaja en dos leyes: la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, y la propuesta de una nueva ley que es la de Economía Circular. Sin embargo, después de un año, no se terminan de discutir por el Senado.
Con información de diferentes medios / Agosto 2023